Blessd se cansa de ayudar y se encierra en su propio éxito: “A mí nadie me dio nada, así que ahora tampoco”
En un mundo donde todos piden colaboración como si fuera fiado en tienda de barrio, Blessd ha dicho "no más". El niño mimado del reggaetón paisa, que pasó de las calles de Medellín a giras internacionales, se hartó de apoyar a nuevos talentos y ahora prefiere pensar en lo suyo. Y con lo suyo se refiere, claro, a hits, contratos y no tener que aguantarle más videos en TikTok a ningún novato malagradecido.
El comunicado no oficial pero más claro que un reggaetón sin autotune
Todo empezó cuando alguien en redes —de esos que graban desde una pieza con bombillo pelado— dijo que Blessd "no ayudaba a nadie". Grave error. En menos de 280 caracteres, el cantante respondió con fuego:
“Uno apoyando siempre de corazón, dándole luz a todo el talento nuevo… nunca he necesitado nada de ninguno, al contrario, los pongo a hacer platica”.
Traducción: yo soy el empujón que tu carrera necesitaba y ni gracias me diste.
Del padrino al fantasma
Blessd, que hasta hace un mes grababa con más desconocidos que una emisora universitaria, ahora se declaró en modo individualista premium: no más colaboraciones con el primer pelaito que lo salude bonito. Si quieres montarte en su pista, primero demuestra que no lo vas a traicionar con una indirecta por redes y 4 historias de “yo sí soy real”.
El colmo del descaro
Porque como él mismo insinuó, le han sacado más provecho que a una pista de reguetón en enero, y ahora resulta que ni un “gracias parcero” le dejan en el DM. Claro, cuando lo etiquetaban era “el duro que me creyó”, pero cuando el algoritmo flaquea, el discurso cambia a “ese man no ayuda a nadie”.